El rejuvenecimiento facial es un objetivo común para muchas personas que desean lucir más jóvenes y revitalizadas. A lo largo de los años, ha habido un aumento significativo en la popularidad de los procedimientos no quirúrgicos para lograr este objetivo. El avance de la tecnología y las técnicas médicas ha permitido el desarrollo de una amplia gama de opciones de rejuvenecimiento facial sin cirugía, que van desde tratamientos con láser hasta inyecciones de rellenos dérmicos. Sin embargo, junto con esta creciente popularidad, también han surgido muchos mitos y conceptos erróneos en torno a estos procedimientos. En este blog, el Dr. Jorge Alberto Espinosa Reyes desmitifica algunos de los mitos comunes y comparte las verdades detrás del rejuvenecimiento facial sin cirugía.

Mito 1: Los tratamientos no quirúrgicos no son efectivos y solo ofrecen resultados temporales.
La verdad: Si bien es cierto que los tratamientos no quirúrgicos no ofrecen resultados tan dramáticos y duraderos como los procedimientos quirúrgicos, pueden ser altamente efectivos para tratar una variedad de preocupaciones estéticas y proporcionar resultados visibles y duraderos. Los avances en tecnología han permitido el desarrollo de tratamientos como el láser fraccionado, la radiofrecuencia y los ultrasonidos focalizados de alta intensidad (HIFU), que pueden estimular la producción de colágeno y mejorar la calidad de la piel. Además, los rellenos dérmicos y las toxinas botulínicas pueden usarse para suavizar arrugas y líneas de expresión, y los resultados pueden durar varios meses, dependiendo del producto utilizado.
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Mito 2: Los tratamientos no quirúrgicos son dolorosos e incómodos.
La verdad: Si bien algunos tratamientos no quirúrgicos pueden causar cierta incomodidad o sensación de picazón durante el procedimiento, generalmente son bien tolerados por la mayoría de los pacientes. Además, los médicos suelen utilizar anestesia tópica o local para minimizar cualquier molestia. Algunos tratamientos, como el láser fraccionado, pueden causar una sensación de calor o ligero dolor durante el procedimiento, pero esto suele ser temporal y puede aliviarse con analgésicos suaves o compresas frías.
Mito 3: El rejuvenecimiento facial sin cirugía no requiere tiempo de recuperación.
La verdad: A diferencia de la cirugía plástica, que generalmente requiere un tiempo de recuperación prolongado, los tratamientos no quirúrgicos tienen un tiempo de inactividad mínimo o nulo. Aunque los pacientes pueden regresar a sus actividades normales de inmediato, es recomendable evitar la exposición excesiva al sol y seguir las instrucciones postoperatorias proporcionadas por el médico para garantizar una recuperación adecuada.
Mito 4: Cualquier persona puede realizar tratamientos no quirúrgicos sin tener en cuenta su historial médico.
La verdad: Si bien muchos tratamientos no quirúrgicos son seguros y efectivos para la mayoría de las personas, no todos son candidatos ideales. Antes de someterse a cualquier procedimiento, es importante consultar a un médico especialista en cirugía plástica o dermatología estética. El Dr. Espinosa evaluará el historial médico del paciente, incluyendo alergias, condiciones médicas preexistentes y medicamentos que esté tomando, para determinar la idoneidad del tratamiento. Además, un profesional capacitado puede evaluar de manera más precisa las preocupaciones individuales de cada paciente y recomendar el tratamiento más adecuado para lograr los resultados deseados.
Mito 5: Los tratamientos no quirúrgicos son equivalentes a la cirugía plástica y ofrecen los mismos resultados.
La verdad: Si bien los tratamientos no quirúrgicos pueden brindar mejoras significativas en la apariencia facial, no pueden lograr los mismos resultados que la cirugía plástica en términos de levantamiento facial o eliminación del exceso de piel. Para pacientes con flacidez severa o laxitud en la piel, la cirugía plástica, como el estiramiento facial o el lifting de cuello, puede ser la opción más adecuada. Los tratamientos no quirúrgicos son más efectivos para abordar problemas específicos, como arrugas, líneas de expresión y pérdida de volumen facial.
En Plástica Colombia, te recomendamos consultar con el Dr. Espinosa, así puedes obtener recomendaciones personalizadas y recibir los tratamientos más adecuados para tus necesidades individuales. Recuerda que el rejuvenecimiento facial es un proceso personal y único, y los resultados más satisfactorios se obtienen cuando se busca la orientación de profesionales calificados y se establecen expectativas realistas¡ Agenda una cita para conocerlos!